Se considera acosador alguien que acecha, persigue, provoca un daño de manera repetida y persistente a una misma víctima, con el propósito de generar un malestar y repercutiendo en su salud mental y física.
La acción se puede ejecutar físicamente, verbal, mediante internet, persiguiendo a la víctima… Y puede aparecer en distintos ámbitos como el laboral, escolar o doméstico. Aunque el primer objetivo puede no buscar dañar al acosado, dada la continua persecución que se produce termina afectando negativamente. Los temas relacionados también son distintos, desde sexuales hasta políticos, pasando por profesionales o de lujuria.
Dada la gravedad de la conducta, puede comportar una violencia ejercida de forma repetida, se considera un delito penal y como tal es castigado con pena de prisión, multas o servicios comunitarios, dependiendo de las circunstancias y de la víctima acosada, por ejemplo si hay relación de parentesco o la víctima es vulnerable y reside con el abusador el delito es de tipo agravado.
En este artículo, te definimos qué se entiende por acosador, qué conductas tiende a realizar, cómo es penada legalmente esta conducta y qué tipos de acosadores existen citando sus principales características.
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¿Qué significa ser un acosador?
Si buscamos en el diccionario vemos que acosador se define como alguien que acosa, pero, ¿qué es acosar? Acosar consiste en perseguir o molestar de forma repetida y persistente a un individuo, esta acción puede ser física, psicológica o mediante tecnologías como puede ser internet o el teléfono móvil. El propósito de tal conducta es incomodar o crear disconformidad con la otra persona, es decir, aparece un malestar en el individuo acosado.
El acoso puede aparecer independientemente de la clase social, nivel económico, edad… De este modo puede ejercerse de un superior a su subordinado o al revés. El acoso es posible que provenga de una persona o puede realizarse por un grupo de individuos.
Así pues, el acoso se considera un delito, está recogido dentro del Código Penal, ya que atenta contra la libertad de las personas, más concretamente se considera coacción, que consiste en una fuerza o violencia que se ejerce sobre alguien para obligarlo a decir o hacer algo en contra de su voluntad.
Las penas pueden variar según las circunstancias o características de la víctima: el acoso puede ser castigado con prisión de 3 meses a 2 años o con una multa de 6 a 24 meses; si la víctima es vulnerables, es decir, tiene dificultades para defenderse, por ejemplo por discapacidad o por ser menor de edad, la pena será de prisión entre 6 meses a 2 años; si el acoso se ejerce a algún familiar o individuo vulnerables que vive con el acosador se podrá castigar con 1 o 2 años de prisión o con 60 a 120 días de trabajo comunitario.
Las conductas que se consideran acoso pueden ser las siguientes: vigilar, perseguir o intentar contacto físico no deseado; establecer contacto mediante algún medio de comunicación o una tercera persona; utilizar los datos personales de una persona de manera inadecuada; ir en contra de la libertad o contra los bienes de una persona. En todo caso, todas estas acciones se realizan en contra de la voluntad o consentimiento de la víctima.
¿Qué clases de acosadores existen?
Así pues, aunque la intención puede ser similar, afectar a la víctima, existen distintos tipos de acosadores según el ámbito, objetivo o contexto en el que tiene lugar. A continuación te presentamos una clasificación de las distintas clases de acosadores.
1. Acosador político
El acosador político es aquel que persigue o se muestra insistente a causa de creencias políticas de la víctima, ya sea porque está en desacuerdo o de acuerdo con ellas. El individuo intentará ponerse en contacto o seguirá a la víctima independientemente de que esta sea o no conocida. Este acoso lo pueden recibir sobre todo políticos, puesto que al ser personajes públicos es fácil conocer sus creencias, pero también individuos anónimos.
2. Acosador por rechazo o humillación amorosa
El acosador por rechazo es aquel que acecha a su víctima después de que esta no haya aceptado tener nada con él/ella. El acoso puede tener como objetivo conseguir que la víctima termine aceptando su petición, es decir, que acepte estar con él o simplemente vengarse por haberle rechazado, humillado y herido sus sentimientos.
En casos graves, este tipo de acoso puede observarse en sujetos con delirio erotomaníaco, estos individuos presentan un trastorno psicótico y creen plenamente que otra persona, normalmente un famoso, está enamorada de ellos, de este modo empieza una conducta de persecución de intentar ponerse en contacto, ya que creen tener un vínculo que en realidad no existe.
3. Acosador de famosos
El acosador de famosos como bien indica su nombre acecha a personas conocidas, personajes públicos que se han hecho famosos por distintas razones (música, cine, televisión…). Es tal la obsesión del acosador que hará cualquier cosa para ponerse en contacto y para que el famoso conozca de su existencia. Su ídolo se convierte en la persona más importante de su vida y cree que existe un vínculo entre ambos que realmente no es recíproco.
4. Acosador doméstico
El acosador doméstico es uno de los perfiles más habituales y también uno de los más peligrosos ya que se realiza en el hogar, de manera privada, estando la víctima cerca del acosador. Así pues, el afectado puede tener más dificultad para huir y es común que el acoso termine convirtiéndose en violencia doméstica.
5. Acosador lujurioso
El acosador lujurioso siente un deseo o excitación sexual hacia su víctima, a la cuál sigue o acecha sin que haya un contacto directo, puesto que en este caso ya hablaríamos de acoso sexual o incluso violación sexual si satisface sus fantasias.
6. Acosador sexual
En el acoso sexual a diferencia del anterior no consiste simplemente en seguir a la víctima, sino que establecerá un contacto directo con ella ya sea en persona, mediante intermediarios o mensaje con el propósito de conseguir mantener relaciones sexuales con ella, quien se muestra contraria a esta propuesta.
Las conductas realizadas pueden ir desde tocamientos no consentidos, comentarios o gestos de contenido o características sexuales, hasta actos de violencia física. Se pueden ejercer mediante mensajes, llamadas, intimidaciones físicas, no permitiéndole escapar, haciendo preguntas inadecuadas sobre su vida sexual o comentarios obscenos y sexuales sobre su cuerpo.
7. Acosador escolar
El acoso escolar, también conocido como bullying, consiste en un maltrato psicológico o físico que se ejerce entre estudiantes, es habitual que el acecho no quede solo en el aula sino que también continúa fuera mediante por ejemplo las redes sociales. Se considera una forma grave de violencia escolar ya que se realiza de forma persistente y repetida.
Es habitual que la víctima muestre miedo a ir al colegio o se sienta sola, ya que en muchas ocasiones el acoso no procede solo de un sujeto sino de más e incluso quien no lo ejerce también decide no acercarse para evitar recibir el mismo daño. Del mismo modo, la salud mental se ve muy afectada pudiendo desarrollarse trastornos depresivos o de ansiedad o derivar en la peor de las consecuencias como es el suicidio.
8. Acosador laboral
El acosador laboral acecha a su víctima con el propósito de generar miedo, desánimo, desprecio, es decir, malestar y conseguir que el afectado dimita o esté sometido a sus demandas. Esta acción, que también se conoce con el nombre de mobbing, se realiza en el ámbito laboral, pudiendo ejercer como acosador alguien superior o inferior jerárquicamente hablando o alguien del mismo nivel, un compañero.
9. Acosador profesional
El acosador profesional es alguien que actúa, persigue, con el propósito de conseguir dinero, dicho de otro modo él no es quien tiene la intención de producir un malestar a la víctima, sino que lo hace para satisfacer los deseos de otra persona, quien realmente es quien tiene el propósito de acosar, a cambio de dinero.
10. Acosador psicológico
El acosador psicológico ejerce la violencia psicológica de manera repetida con la finalidad de dañar a la víctima. De este modo, el acoso se realizará principalmente de forma verbal, mediante las palabras, como: humillaciones, desvalorizaciones, insultos, menosprecios, descalificativos, entre otros. El propósito principal es alterar la salud mental de la otra persona.
11. Acosador físico
El acosador físico, a diferencia del anterior, sí que produce un contacto físico con la víctima, es decir ejerce violencia física sobre ella, aunque esta puede ser de distinta intensidad, las consecuencias son fatales y pueden incluso comportar la muerte del afectado. En este caso el objetivo principal es producir un daño físico aunque también termina generando un daño psicológico.
12. Ciberacosador
El ciberacosador es quien acosa a la víctima de manera virtual, acción que también conocemos como ciberbulling. La actuación puede consistir en un ataque directo a la víctima, en difundir información falsa sobre ella, en suplantar su identidad… Estas acciones se caracterizan por estar realizadas, en muchas ocasiones, de forma anónima y tener un amplio alcance, es decir, la información puede llegar a muchas personas y de forma muy rápida.
